Desde que nacieran en 1998, Omán Impresores tenía clara su filosofía: “adaptarnos sin miedo a las nuevas tecnologías pero sin olvidar aquellas técnicas tradicionales que, combinadas, nos permiten seguir dando otra dimensión al papel”. Desde entonces no han dejado de crear esa otra dimensión y ofrecer mejores soluciones a sus clientes. Y así han pasado 20 años, como ellos reconocen, “igual de apasionados que el primer día por esta profesión”.